Con la llegada del frío suelen proliferar determinadas patologías muy comunes de esta época del año. Una de las más usuales suele ser la infección de garganta, un trastorno que no suele ser grave, pero si resulta muy molesto. En tu blog saludable de Sanitas Promo Salud te explicamos cómo prevenir la amigdalitis en invierno.
La definición del término amigdalitis de manera concreta es inflamación de las amígdalas, una enfermedad que normalmente no conlleva gravedad ya que suele tener un origen viral y que es muy común en personas que tienen el sistema inmune más débil y en la edad infantil.
Qué síntomas presenta la amigdalitis
La sintomatología general se suele caracterizar por:
- Inflamación y enrojecimiento de las amígdalas.
- Dolor de garganta.
- Dificultad para tragar alimentos y bebidas.
- Halitosis.
- Afonía.
- Fiebre.
- Dolor de cabeza y de cuello, incluyendo rigidez en este.
- Placas de color blanco o amarillo en las amígdalas.
- Inflamación de los ganglios linfáticos.
- Dolor de estómago en algunas ocasiones.
Todos son síntomas bastante molestos y que provocan que no se pueda llevar una vida normal durante varios días debido al malestar general que se siente. Por eso lo mejor es prevenir lo máximo posible la aparición de esta patología. Te contamos cómo hacerlo.
Recomendaciones para prevenir esta afección
- Evitar la exposición a cambios bruscos de temperatura, saliendo de lugares con la calefacción muy alta al frío de la calle sin abrigo, o quitarnos demasiada ropa al hacer deporte.
- No ir excesivamente abrigado para evitar tener calor, sudar y coger frío al quitar prendas de abrigo y quedar más expuesto a las bajas temperaturas.
- Mantener las estancias de trabajo y la casa a una temperatura media, ni fría ni demasiado cálida.
- Ventilar tanto el domicilio como los lugares de trabajo diariamente como mínimo 10 minutos.
- Evitar los ambientes demasiado secos que resecan la garganta, y procurar que tengan la humedad adecuada especialmente cuando se ponga la calefacción.
- Lavar las manos de forma frecuente.
- No fumar ni estar en sitios donde se fume.
- Consumir diariamente alimentos que contengan elevadas cantidades de vitaminas A y C.
- Consumir bastante líquidos que estén templados o naturales, evitando las bebidas frías y el hielo.
Con estas sencillas recomendaciones prevenir la amigdalitis en invierno es posible. Si quieres saber más, clica aquí y contacta con nuestros agentes expertos.